Nos encanta estar con nuestros bebés luego de dar a luz y por eso aprovechamos el postnatal lo mejor posible, sin embargo, al culminar y regresar al trabajo nuestros senos aún estarán llenos de leche y se nos hará un poco difícil adaptarnos al cambio, para ello, la Enfermera Matrona de la UC; Blanca Ossa, nos da algunas recomendaciones.
La molestia del goteo de los pechos en el trabajo
- Lo más probable es que se activará el mecanismo de la bajada de leche, sobre todo en los horarios en los se acostumbraba amamantar al bebé y podríamos escaparse o gotearte la leche.
- Si te extraemos la leche regularmente en el trabajo, por ejemplo en la pausa de la mañana, a la hora de almuerzo y en el descanso de la tarde, evitaremos que los pechos goteen ya que los estaremos vaciando con frecuencia.
- Si la idea es guardar esta leche, para dársela a nuestro hijo después, recordemos que la leche materna dura 12 horas a temperatura ambiente, eso sí, a no más de 20°C.
- Un accesorio que no puede faltar en tu cartera son las almohadillas protectoras de los pechos, que absorben la leche que pudiera escapar para evitar que se manche o moje la ropa.
Los viajes de trabajo y la lactancia
- Si el trabajo incluye continuos viajes fuera de la ciudad, debemos asegurarnos de dejar suficiente leche para el bebé almacenada y refrigerada, e incluso congelarla si el viaje es muy largo.
- Para el viaje llevemos el extractor, y continuemos sacando leche como si estuvieras en tu lugar de trabajo.
- Aunque en esos días quizás tendremos que desechar la leche, esto nos asegura mantener el suministro para cuando regresemos a casa.
¿Es necesario que les cuente a mis colegas que me extraigo leche en el trabajo?
- Como en toda actividad que realizamos, si nos sentimos apoyados por otras personas nos sentimos más seguros y motivados a continuar; este también es el caso de la lactancia.
- Por lo que si conoces a otras madres en tu situación o madres que ya han pasado por ella, puedes pedirles su apoyo y consejos.
- Pero por otro lado, no estamos obligada a contarle a nuestros colegas lo que hacemos en horarios de descanso, pero sí tendremos que avisarle al supervisor, sobre todo si es él quien debe proveernos del espacio y privacidad necesaria para extraer la leche.
- Aunque los empleadores saben que por ley debe dar las pausas necesarias para la lactancia, no está de más asegurar que la extracción de leche en el trabajo no interferirá en el rendimiento laboral.