La Fiesta de Fin de Año tiende a generar mucha alegría en las mayoría de las personas porque representa la culminación de un ciclo y comienzo de otro. Pero para otros individuos, como los niños, representa un duro momento ya que tienen a recordar a familiares que murieron en el lapso de 12 meses.
Y es que para los infantes la noche que precede al Año Nuevo representa una época de contrastes. Por un lado se escucha música alegre en la casa, mientras que por el otro analiza las causas por las cuales un padre, hermano o abuelo partieron al cielo.
¿Qué se debe hacer cuando esto pasa? Facemamá te les dará algunas recomendaciones a los padres, para que puedan ayudar a sus hijos a afrontar las pérdidas de sus seres queridos en una etapa de celebración.
¿Cómo ayudar a los niños a aceptar las pérdidas?
De acuerdo con la organización de psicología AARP, para ayudar a los niños a afrontar la muerte de sus allegados se debe hacer lo siguiente:
- Ser comprensivo. Si un chico no desea festejar la llegada de un nuevo calendario porque siente un dolor, se debe entender la razón y apoyarlo. Hablar y mostrarle cariño lo hará sobrellevar mejor esta situación.
- No reprimir sentimientos. A los jóvenes hay que motivarlos a expresar sus emociones. Si desean llorar o hablar para desahogarse, hay que apoyarlos con el fin de que puedan bajar los niveles de estrés.
- Motivar la actividad. Para impedir que se presente un cuadro de depresión en muchachos, es necesario impulsarlos a realizar una actividad como caminar, ver fotografías o películas, entre otras cosas, que les permitan distraerse en momentos en los que rechazan ser partícipes de festejos.
Más consejos para ayudar a los infantes a afrontar el duelo
Child Mind Institute dio a conocer otras recomendaciones para que los menores de edad afronten la pérdida de familiares. Entre ellas sobresalen:
- Commemorar al ser querido. Para superar las malas sensaciones que produce el fallecimiento de un ser querido, hay que reconocer su legado de vida a través de diferentes actividades. Encender velas en su nombre, ver fotos de sus momentos de vida y hablar sobre los ausentes es ideal para conservar la presencia de los difuntos en los corazones de niños.
- Dejarlos jugar. Algunos reyes de la casa desean recrerse a través del juego para despejar un poco su mente. En esos casos es bueno dejarlos solos algunos minutos, con el fin de que desarrollen su actividad preferida.
- Dibujar para expresar. Algunos infantes tienden a hablar poco en procesos de duelo, razón por la que motivarlos a trazar líneas les permitirá expresar mejor sus sentimientos y desechar comportamientos negativos.
En caso de que los jovencitos sean reacios a realizar estas actividades la Organización Mundial de la Salud (OMS) insta a los papás a llevarlos a especialistas en psicología con el fin de que puedan afrontar el duelo, uno de sus peores momentos.