Descubriendo la exterogestación: una guía para comprender y practicar este método de crianza

Descubriendo la exterogestación

La exterogestación es un concepto que ha ganado interés en el ámbito de la crianza y la maternidad, refiriéndose al proceso de continuar brindando al bebé un entorno similar al útero materno incluso después del nacimiento.

Esta práctica busca ofrecer al recién nacido un ambiente seguro, cálido y acogedor que fomente su desarrollo físico, emocional y cognitivo.

¿Qué es la exterogestación y por qué es relevante?

La exterogestación se refiere al proceso de prolongar el ambiente uterino fuera del vientre materno para brindar al bebé un entorno que simule la seguridad y protección que experimentaba en el útero durante el embarazo.

Esta práctica reconoce la importancia de continuar ofreciendo al recién nacido un espacio que le permita adaptarse gradualmente a su nueva realidad, promoviendo su bienestar físico y emocional.

La exterogestación se basa en la premisa de que los bebés humanos nacen prematuramente en comparación con otras especies, y que necesitan un cuidado y apego cercano para su óptimo desarrollo.

Principios de la exterogestación en la crianza

La exterogestación se fundamenta en varios principios clave, como el contacto piel con piel, el porteo, el colecho seguro y la lactancia a demanda.

Estas prácticas buscan replicar la sensación de seguridad y protección que experimentaba el bebé en el útero materno, fortaleciendo el vínculo afectivo entre el bebé y sus cuidadores.

El contacto piel con piel, por ejemplo, ayuda a regular la temperatura corporal del bebé, promueve la lactancia materna y favorece la liberación de hormonas que generan sensaciones de bienestar y tranquilidad tanto en el bebé como en los padres.

Beneficios de la exterogestación para el bebé

Prácticas recomendadas para llevar a cabo la exterogestación

Consejos para implementar la exterogestación en la crianza diaria

Algunos consejos prácticos para implementar la exterogestación en la crianza diaria incluyen dedicar tiempo de calidad para el contacto piel con piel con el bebé, practicar el porteo de forma segura y ergonómica, establecer una rutina de colecho seguro, mantener una comunicación abierta y afectuosa con el bebé, y buscar apoyo y orientación de profesionales de la salud y expertos en crianza respetuosa.

Estos consejos pueden ayudar a los padres a sentirse más seguros y preparados para llevar a cabo la exterogestación de manera efectiva, brindando al bebé un entorno enriquecedor y amoroso que favorezca su desarrollo integral.

Salir de la versión móvil