¿Por qué es importante jugar con Lego?

El Lego fomenta la creatividad de los niños

La creatividad va de la mano con la infancia y los juegos de construcción, en especial aquellos que se realizan con los bloques armables Lego, se convierten en la herramienta ideal para que los niños desarrollen al máximo sus habilidades, tal y como señalan médicos de América y Europa.

Estudios de la Asociación Española de Pediatría (AEP) demuestran que mediante la fabricación de pequeñas casas o bases con piezas de Lego (pequeños ladrillos de plástico creados por Ole Kirk Christiansen en 1932 en Dinamarca y que son los más populares del planeta) los chicos pueden entender e inventar cualquier cosa que se propongan.

«Expertos del aprendizaje y la psicología han contribuido a establecer el método Lego, que reporta numerosas ventajas en la resolución de problemas cotidianos. Son ideales para que los pequeños puedan potenciar actividades neuronales y ser más activos en todas las áreas», explicó Abacus, un portal de carácter educativo.

Ventajas de armar objetos de Lego

Go Student, un sitio web con sede en Estados Unidos, dio a conocer esta semana los beneficios que produce utilizar piezas de Lego en las actividades lúdicas que efectúan los infantes, que se pueden convertir en excusas ideales para que chipilines y padres se junten y «diseñen nuevos mundos».

A continuación Facemamá te presentará algunas ventajas que produce esta actividad:

  • Despierta la creatividad. Los niños pueden construir la figura que aparece en la caja de algún paquete, pero una vez que la completen, la desarmarán y diseñarán cosas totalmente nuevas, algo que los ayudará a contar con más agilidad mental.
  • Estimulación cerebral. Cuando un chico puede analizar las piezas que necesita para completar una forma, así como los distintos órdenes de colocación para completar ese objetivo, se transforma en más inteligente. Eso sucede porque los chicos a resolver problemas matemáticos y espaciales al momento de afrontar la escolaridad.
  • Mejora la motricidad. Al estar obligados a colocar diminutos ladrillos en un orden específico, los huesos y músculos de los «reyes de la casa» se acoplan para ejecutar movimientos precisos y rápidos.
  • Reducción del estrés. Al concentrarse en una actividad única que requiere el constante análisis, y que regularmente resulta entrenenida, los muchachos no tienen espacio para pensar en los problemas que pueden generarles angustia, razón por la que los médicos psquiatras recomiendan ensamblar «edificaciones de Lego» en momentos en los que se sospeche de la presencia de depresión.
  • Eleva el autoestima. Cuando un menor de edad logra fabricar un pequeño automóvil, una casa o un castillo a base de los ladrillos de plástico, se siente capacitado para ejecutar cualquier acción y por eso se convierten en seres con mayor autoconfianza.
  • Diversión. Cuando un muchacho se dedica a armar cualquier objeto, tiende a sonreír porque puede ver cómo cada una de las uniones se convertirán en una gran creación los inspira y alegra por partes iguales.

Un juguete que sirve como elemento unificador

Según el portal EKA, cuando los niños y sus papás se juntan para edificar algún objeto con Lego, tienden a estrechar sus lazos, algo que convierte al juguete en un elemento unificador.

Esa opinión es respaldada por Abacus que asevera que «los niños y niñas que juegan con sus padres crearán una relación sólida y fuerte. Esto hace que ambos trabajen de manera conjunta para conseguir un objetivo, mientras el debate y la conversación tienen cabida. Los lleva a estar relajados, con la mente centrada en la acción y eso, a su vez, les permite actuar con normalidad y consolidar su vínculo».

Por esas razón siempre será importante fomentar el trabajo conjunto entre progenitores y descendientes, pues las relaciones sanas generarán que no existan familias disfuncionales, algo fundamental para mantener la armonía en el planeta, tal y como sugiere la Organización Mundial de la Salud (OMS).


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