¿Cómo prevenir la debilidad en la vejiga durante el embarazo?

Cómo prevenir la debilidad en la vejiga durante el embarazo

Muchas mujeres sufren de incontinencia durante y después del embarazo. ¿Cómo prevenir la debilidad en la vejiga durante el embarazo? Esto se puede prevenir con ejercicios del suelo pélvico. La gimnasia o el yoga durante el embarazo pueden hacerte bien.

Estar embarazada es maravilloso. Muchas mujeres ahora sienten mucha energía y están llenas de anticipación por la pequeña criatura que está creciendo dentro de ellas.

Sin embargo, casi una de cada dos mujeres también conoce una molestia desagradable por primera vez: La incontinencia urinaria. Pierden algo de orina cuando estornudan, se ríen o levantan objetos pesados ​​porque los músculos que sostienen el esfínter de la vejiga no se contraen tan bien.

La razón de esto: Durante el embarazo, se produce más progesterona, lo que suaviza el tejido. Este es un proceso normal e importante para preparar el cuerpo para el parto. La debilidad de la vejiga a menudo desaparece por sí sola después del parto, pero una de cada diez mujeres tiene que lidiar con eso durante mucho tiempo.

A quién golpea también es una cuestión de genes. El 30 por ciento de todas las mujeres con trastornos después del embarazo y el parto muestran una predisposición familiar. ¿Cómo prevenir la debilidad en la vejiga durante el embarazo?

Antes del embarazo

  • No fumes: las mujeres que fuman antes del embarazo tienen más probabilidades de experimentar debilidad de la vejiga durante y después. Porque suelen toser de forma crónica, lo que aumenta la presión en el abdomen y tensa el suelo pélvico. Por lo tanto, es mejor dejar de fumar a tiempo.
  • Presta atención al peso: demasiados kilos en el cuerpo debilitan los músculos del suelo pélvico. Incluso si deseas tener hijos, debes intentar alcanzar tu peso normal.

¿Cómo prevenir la debilidad en la vejiga durante el embarazo?

  • Muévete: Las embarazadas activas tienen un suelo pélvico fuerte. Sin embargo, no todos los deportes son adecuados. Recomendamos movimientos suaves como yoga, gimnasia, caminar o bailar, preferiblemente varias veces a la semana. Las mujeres equilibran sus cuerpos y reducen el estrés. Las futuras madres deben evitar movimientos intensos como saltar.
  • Entrenar el suelo pélvico: El entrenamiento del suelo pélvico es una forma eficaz de fortalecer el suelo pélvico desde el principio del embarazo. Quienes practican regularmente tienen buenas posibilidades de no sufrir incontinencia después del parto. Es crucial para un entrenamiento exitoso que sea instruido profesionalmente. En los cursos también aprendes comportamientos que protegen el suelo pélvico en la vida cotidiana, por ejemplo, tensar el suelo pélvico antes de levantar algo pesado. Incluso la sexualidad suave tiene un efecto fortalecedor en el suelo pélvico.
  • Evita el estreñimiento: Muchas mujeres embarazadas están familiarizadas con la digestión lenta, combinada con una sensación de saciedad y gases. Sin embargo, el estreñimiento y el esfuerzo al ir al baño son factores de riesgo para la incontinencia. Cualquier persona que tiende a hacerlo debe asegurarse de beber mucho líquido  y seguir una dieta rica en fibra. La pulga o la linaza estimulan la digestión tanto como el ejercicio. El suelo pélvico consta de tres capas de músculos que cuelgan como una vela entre las nalgas, el coxis y el hueso púbico.  Normalmente, los músculos mantienen cerrada la uretra.  Sin embargo, no se contraen tan bien durante el embarazo.  El útero con el bebé  y en el estreñimiento del recto  ejercer presión adicional sobre la vejiga

Después del nacimiento

  • Ejercicios: Una vida cotidiana activa hace que los músculos del suelo pélvico se ajusten después del parto. Sin embargo, debes  comenzar lentamente, al principio solo da un paseo corto.
  • Ejercitar el suelo pélvico: Todas las madres deberían hacer un curso de rehabilitación con ejercicios del suelo pélvico, incluso después de una cesárea. Puedes comenzar seis u ocho semanas después del parto. El entrenamiento también previene los efectos a largo plazo.
  • Presta atención al peso: Durante el embarazo, el aumento de peso tiene poco efecto sobre el riesgo de incontinencia. Sin embargo, los investigadores han demostrado que las mujeres que recuperaron su peso inicial seis meses después de dar a luz tenían una probabilidad significativamente menor de sufrir problemas del suelo pélvico.

Te puede interesar:

Cordón umbilical: Todo lo que debes saber sobre su estructura y funciones