¿Está el bebé dentro del comportamiento “normal”?

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Junto con la felicidad de ser padres, vienen múltiples dudas sobre lo que es normal y lo que no en la vida diaria del bebé. Asuntos como los trastornos del sueño, la alimentación, los llantos o rabietas preocupan con frecuencia a los papás primerizos.

En esta nota te contaremos qué puedes esperar de los primeros meses del pequeño. ¿Está el bebé dentro del comportamiento “normal”?

Sueño inestable

Es muy común que los bebés no duerman bien y que esos trastornos del sueño lleven a los papás a consultar con médicos al respecto. La verdad es que esto es absolutamente normal, ya que durante los primeros 3 meses los retoños no pueden conciliar el sueño fácilmente y, por lo tanto, el sueño de toda la familia se ve interrumpido.

Trastornos alimenticios

Aquí hay que hacer una observación: no es lo mismo regurgitar que vomitar. En el primer caso, se devuelven pequeñas cantidades de leche después de alimentarse, lo que es normal e inofensivo. Pero, si tu bebé vomita, puede sufrir algún problema de digestión o dolor abdominal. A medida que crezca, si el niño presenta dolor, diarrea, vómitos o fiebre es urgente acudir a un profesional de la salud.

Llanto abundante

Cuando el bebé es pequeñito, las lágrimas son su manera de comunicar hambre o malestar. Para los papás es todo un sufrimiento no saber qué pasa con su hijo, sobre todo si el llanto es interminable y no calma con nada. No te alarmes, lo que debes hacer es tratar de tranquilizar al pequeño tomándolo en tus brazos y no pensar automáticamente que está sufriendo. Con el tiempo aprenderás a identificar el idioma de los bebés.

Famosas pataletas

Asimismo, las rabietas o la irritabilidad son frecuentes en los niños. Si bien pueden originarse por un dolor físico, a menudo tienen que ver con la frustración que sienten por algo que no les gusta (verás cómo aprenderá a decir que “no”).

Las pataletas no son motivo de preocupación, a no ser que el bebé muestre un cambio repentino de conducta a todo nivel. En cualquier caso, siempre es bueno tener un médico de confianza para que responda a las inquietudes que te surjan en el camino.

 


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