La historia tras la cigüeña

cigüeña

En el pasado, los abuelitos insistían en que los bebés venían nada menos que de París, bajo las alas de un ave curiosa, la cigüeña. ¿Cuál es el origen de esta leyenda?

 

¿Qué tiene que ver la cigüeña?

Esta ave se caracteriza por el gran cuidado que despliega hacia su familia, teniendo una pareja de por vida y preparando su nido por años con gran esmero. Por esta razón, es el símbolo del amor maternal, siendo también un ejemplo de dedicación entre los animales. Se dice que los romanos consideraban a las cigüeñas como aves sagradas por su comportamiento y características especiales.

Según la leyenda popular, estos pájaros anidaron en el techo de una casa durante bastante tiempo, emigrando posteriormente cerca de París. Cuando volvieron al nido, la familia de esa casa tuvo un bebé; vinculándose la presencia de este recién nacido con las aves. El mito cuenta que éstas trajeron al bebé colgando de su pico y lo dieron a los maravillados padres.

¿Qué tiene que ver Paris?

Como ya se mencionaba, una razón es que el origen de este mito sitúa el viaje de las cigüeñas desde París hasta la casa del famoso bebé.

Otra historia plantea que las cigüeñas no viajaron a París, sino a una región francesa llamada Alsacia; región favorita de estas criaturas que emigran desde África. Sería en este lugar donde anidaron en los techos de los hogares. No obstante, por ser Paris la “ciudad del amor” se trasladó allá el mito para que cobrara más vida y romance.

Aunque hoy nadie cree que los bebés vengan de París, sí es una bella historia que contar, y sirve de inspiración para muchos diseños relacionados con bebés y con maternidad.

 

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